Hace 15 años, entre el 4 y el 8 de abril de 1994, el cantante y guitarrista de Nirvana, Kurt Cobain, se suicidaba pegándose un tiro con una escopeta y pasando a engrosar el Club de los 27 (junto con Jimi Hendrix, Janis Joplin y Jim Morrison). Preso de la fama y la heroína, que empezó a consumir para contrarrestar sus dolores estomacales, con un carácter muy depresivo, era de esperar que algo así ocurriría. Llegó a lo más alto con su grupo, perfilando los detalles del grunge, la curiosa mezcla de punk, heavy y rock que representa a la conocida como Generación X; pero había estado en contacto con lo más bajo, llegando a dormir en las calles de los suburbios de Seattle.
Su figura, quizás excesivamente mitificada, ha perdurado y ha pasado a engrosar el panteón del rock junto con los más grandes, continuando siendo rentable hasta después de muertos (una de las mayores fortunas post-morten según la revista Forbes).
1 comentario:
viva kurco coño
Yo aun sigo sin asimilar que hendrix tambien muriera con 27 años...xD
Publicar un comentario