viernes, 20 de marzo de 2009

Stalker


Imaginaos un cataclismo desconocido en un país sin nombre. Imaginaos que las autoridades, para investigar lo ocurrido, envían un contingente de militares que nunca regresa. Imaginaos que deciden cortar por lo sano: acordonan la Zona y vigilan que nadie entre sin permiso. Pero comienza a correr el rumor de que existe una habitación dentro de la Zona que concede los deseos más íntimos, y algunas personas, llamadas stalkers, ofrecen sus servicios para acompañar a los curiosos al interior de la misma.

Así arranca Stalker, rodada en 1979 por el reconocido director ruso Andréi Tarkovski. Con una trama propia de cualquier película de ciencia-ficción, Stalker es algo más, una auténtica joya del cine. Porque para Tarkovski el argumento es una mera excusa para preguntarse acerca de sus dilemas morales, de Dios, de la naturaleza humana. La película se centra en un stalker que se ofrece a guiar a dos hombres, el Profesor y el Escritor, al interior de la Zona para acceder a la habitación milagrosa y, más que ver cumplido un deseo, encontrarse a sí mismos. Porque los personajes de Stalker son gente que ha caído en lo más bajo, gente sin esperanzas ni nombre que se ha dado cuenta de lo insignificante de sus vidas y tratan de hallarle algún sentido.

En ocaciones quizás excesivamente dramática, Tarkovski consigue trasladar todas sus angustias y dudas al lenguaje cinematográfico, a través de una atmósfera opresiva, de escenarios ruinosos genuinamente soviéticos. Utilizando un lenguaje casi teatral, los actores se desenvuelven muy bien en su papel, interpretando memorables diálogos donde destacan las discusiones entre el Profesor (el lado científico) y el Escritor (el lado pasional).

La fotografía es extraordinaria, con unos planos largos y muy cuidados. Hay que destacar el hecho de que la película está rodada en sepia hasta el momento en que se adentran en la Zona, en el que aparece el color, reflejo muy significativo de los sentimientos del stalker. Conforme avanzan hacia la habitación, queda patente la insignificancia de los humanos, que se ven superados por la Zona, la verdadera protagonista de la película.

En definitiva, una película maravillosa en la que de cada detalle pueden extraerse multitud de alegorías. Una de las mejores películas que he visto. Vedla y juzgad por vosotros mismos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Julio pasame un enlace para verla que no consigo bajarmela

Anónimo dijo...

Julio pasame un enlace para verla que no consigo bajarmela

Anónimo dijo...

xDDD creo que puse 2 comentarios....xDD